ubicación cerca del metro, calefacción funcional, cercanía a cafeterías y mercados.

No entiendo cómo no hay opción de calentar comida en las habitaciones!!! Pides que limpien y no lo hacen, solo te atienden el último día. Además, el ruido por las obras es insoportable, ¡a las 7 am ya estás despierto!!!

La experiencia en el Meininger fue genial. La limpieza de las habitaciones impecable, y la cocina común ideal para preparar mis platos. La cercanía a la parada de metro facilitó los traslados a los mercados locales. Un toque negativo fue la falta de aire acondicionado en la habitación, pero lo demás compensa.

Ubicación perfecta y buenas habitaciones

Estuve con la familia y nos encantó la cercanía al metro, super práctico. La habitación familiar estaba bien, aunque un poco justa. Lo que no nos gustó fue que no limpiaron la habitación en dos días. Pero el bar en la planta baja era genial para relajarse después de un día de turismo.

Para un mayor confort, asegúrate de pedir almohadas adicionales en la recepción, ya que pueden hacer tu estancia más agradable.

Fue una elección económica para un corto retiro en Berlín con buena relación calidad-precio. La atención de Jasmine fue muy amable, lo que hizo la llegada más tranquila. Recomiendo llevar un candado para la taquilla porque no hay disponibles en el hotel.

en mis últimas vacaciones en berlín, el hostal superó mis expectativas. las instalaciones eran limpias y modernas, con camas cómodas y una cocina común bien equipada. además, la ubicación era excelente, justo frente a una parada de metro y con acceso fácil a los tranvías cercanos.

no contaba con aire acondicionado.

Recomiendo para familias en búsqueda de economía

Desde el momento en que llegué, el ambiente era vibrante, perfecto para socializar. La cocina común estaba siempre impecable, así que pude preparar mis propios platos sin problema.

No fue exactamente barato, pero valió la pena.

Estuve con un grupo de amigos y nos encantó la ubicación, cerca de una parada de metro y en un área tranquila. Disfrutamos del bar en el primer piso y de la cocina compartida. La conexión con el transporte facilitó nuestro viaje a lugares como la Puerta de Brandenburgo y el Muro de Berlín, ¡perfecto para nuestra escapada!

Tuvimos un pequeño inconveniente con la habitación, ya que la ducha no tenía recipiente y se inundó todo el piso. Fue incómodo, pero logramos manejarlo.

Super recomendado para una estancia flash

Cómodo ambiente, excelente ubicación, justo al lado de la estación de metro, lo que facilita explorar la ciudad, y un personal amable siempre dispuesto a ayudar que hizo que nuestra llegada fuera agradable. Además, la limpieza de las instalaciones fue impecable, lo que contribuyó a una experiencia general muy positiva.

No hay nada que no me haya gustado

La ubicación es increíble, justo al lado de la estación de metro. Con mamá hicimos un recorrido fácil por la ciudad y los mercados cercanos nos sirvieron para comprar todo lo que necesitábamos. La calefacción del hotel fue perfecta para combatir el frío fuera.

A mis hijos les hubiera gustado que hubiera un aire acondicionado en la habitación.

La habitación que tuve era un poco justa de espacio, apenas cabían las camas y tenían un cabecero tan alto que no dejaba abrir la ventana. Las camas, aunque cómodas, tenían un diseño raro. La ducha no tenía recipiente y se inundó el piso, lo que fue incómodo. Por otro lado, estaba limpia y bien equipada. La calefacción funcionó perfecto, lo que fue genial dado el frío fuera.